A lo largo de la historia, la humanidad ha empleado hierbas con diversos fines: aliviar dolores e inflamaciones, combatir el malestar o ayudar a conciliar el sueño. Las antiguas brujas y sanadoras eran grandes conocedoras de las propiedades de hierbas y plantas. Tú también puedes utilizar las plantas para realizar tus propias preparaciones.
Muchas veces, dejamos que pequeños contratiempos, inevitables en cualquier día cotidiano, nos llenen de preocupación y nerviosismo, impidendo que disfrutemos plenamente de nuestra vida. Aquí te pasamos una sencilla infusión para que puedas utilizar tus sueños como energía positiva y reparadora, que te animará a enfrentar un nuevo día.
Necesitarás:
- Manzanilla
- Miel
- Perfume de lavanda
- Papel y lápiz
Prepara la infusión. Para ello, echa una cucharadita de flores de manzanilla y añade agua hirviendo (para una taza grande) Deja que la infusión repose unos cinco minutos.
Mientras, perfuma el ambiente con incienso a aceite de lavanda.
Cuela la infusión en la taza, y endulzala con algo de miel al gusto. Bébela a pequeños sorbos, a la vez que apuntas sobre un papel aquellas cosas del día pasado que has disfrutado o te han impregnado de energía positiva. Piénsalo; seguro que han sido muchas más de las que crees. Simplemente un día soleado, o un hermoso día de lluvia. La sonrisa agradable de alguien con quién te has cruzado: una vecina, la dependienta de una tienda. La lectura de un libro o una revista.
Este ejercicio, te ayudará pronto a dormir, para que luego afrontes el nuevo día con mayor optimismo.
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